jueves, 31 de agosto de 2017

"La casa de los ecualiptus", de Luciano Lamberti

Terror de bueno, sin fisuras. En su volumen de cuentos, Luciano Lamberti aborda el terror sin ninguna barrera. Su narrativa no tiene miedo en presentar un pueblo fantasma, una pandilla de hombres perro, una chica de pueblo que sufre estigmas y demás elementos que su prosa deja caer y que, por momentos, logra esa sensación física del miedo.
Los cuentos de Lamberti se presentan cortos, con una trama clara y definida, y aparece el terror, el horror y el tránsito por lo fantástico con la misma altura, la escritura de "El asesino de chanchos" no presenta desprolijidades, se trata de una técnica muy cuidada en un género en el cual, en un momento, la técnica no fue lo más importante. En este caso los cuentos que forman "La casa de los eucaliptus" tienen un manejo magistral del lenguaje, un embellecimiento que resulta fatal en el momento de atravesar los paisajes estremecedores de cada una de las historias. Pareciera que Lamberti es un experimentado cirujano para la creación de monstruosas criaturas, especialmente las más oscuras, las que habitan en la sabiola.

"La casa de los eucaliptus", de Luciano Lamberti. Ed. Random House. 2017

lunes, 28 de agosto de 2017

"La uruguaya", de Pedro Mairal

Una novela viajera. Una novela que cruza el charco. Una novela de viaje. Para leer en viaje. Una novela rioplatense. O montevideana. O recontra porteña.
Pedro Mairal pone sobre el río la pequeña odisea de Lucas, un escritor que, en una jornada, viaja a Montevideo a cobrar un par de trabajos adelantados que lo salvarán del aprieto en el que lo tiene haber pasado un tiempo de silencio. Allí se propone un escritor de idiosincrasia rioplatense que, con lo cobrado, no solamente piensa comprar algo de tiempo libre para escribir, sino que tiene una lista de pendientes que van desde devolver dinero prestado, ayudar a su mujer y arreglar nimiedades cotidianas. A esa jornada para buscar dólares en Montevideo (que además involucra temas de la política actual, de la especulación económica, del cepo cambiario) se le suma lo que, quizá, para la libido de Lucas sea lo fundamental, el encuentro con Guerra, la uruguaya.
La uruguaya apreció en la vida de Lucas en un encuentro de escritores que se hizo en Valizas, allí, en una jornada donde había calor, alcohol, porro y ese reviente tranquilo de cuarentones escritores, apareció Guerra y encendió a Lucas para todo el año. Esa vez el encuentro quedó trunco y toda la relación se ha mantenido por mails.
La uruguaya, de Mairal, mezcla lo mejor y lo más cándido del vivillo porteño, con lo más seductor y fatal de la supuesta calidez uruguaya mientras suena Rada de fondo, se almuerza en el Santa Catalina, Gustavo Espinosa es un personaje admirado. Así, entonces, Montevideo depara una serie de paraísos que, como los mejores, se volverán paraísos perdidos.

"La Uruguaya", Pedro Mairal. Ed. Emecé. 2016


domingo, 27 de agosto de 2017

"Distancia de rescate", de Samantha Schweblin

Smantha Schweblin propone una forma sutil del miedo, una insinuación de una situación terrorífica que, en su prosa dulce y delicada, se vuelve una instancia del horror que uno atraviesa con confianza, como si alguien nos guiara con mucha seguridad por un lugar que no conocemos y que resulta un poco perturbador.
La novela se estructura en base a un diálogo que se da entre una mujer que ha llegado hace poco tiempo a un pueblo rural siguiendo el trabajo de su marido, y el hijo de su vecina más cercana, que la va guiando entre los recuerdos que estructuran la trama de la novela. El diálogo, en realidad se da en un plano de "más allá", entre la vida en recuerdos y la muerte. Entre las vecinas se produce una relación que ronda lo filo/erótico. La forastera, entonces, conoce al hijo "raro" de su vecina, quien se altera y le cuenta la historia. A partir de ese momento la novela entra en una serie de episodios que crean el paisaje nada onírico del ambiente rural, donde los agrotóxicos se han cobrado las vidas de varias familias que deciden hacer silencio y aceptar que el negocio del campo transgénico hace que los hijos de estas generaciones culposas y contaminadas por el deseo ambicioso de la riqueza, haga que su descendencia muera, o nazca con malformaciones que los acercan a monstruos.
Samantha Schweblin, entonces, arrima un aura del horror de una bucólica contaminada. Quizá su elemento más valioso sea alejar el prejuicio de que lo ominoso está en la mente atareada y alienada de las ciudades y que el campo, la naturaleza y sus bondades son pacíficos y amistosos.
En una novela corta donde aparecen secretos como pactos, personajes que podrían ser brujas, arroyos envenenados, niños monstruosos y padres que se vuelven locos, Schweblin nos recuerda que el diablo habita en todos lados y que no hay distancia de rescate.

"Distancia de rescate" de Samantha Schweblin. Ed. Random House. 2014.